En la anterior entrada indicaba para la realización de la receta, el molde para magdalenas . Este elemento es, para mí, imprescindible para cualquer receta de muffins, cupcakes o magdalenas.
La mejor forma para aprender en respostería es con el ensayo y el error, pero que disgustos te llevas!!!!! Mis primeras y mis segundas magdalenas fueron un total fracaso.
Primero, las hice con cápsulas y sin molde. Las metí directamente en el horno y con el calor empezaron a abrirse y a perder su forma.
Después, cuando ya tenía este molde metí la masa sin las cápsulas, error!!!!, se quedaron pegadas por muy engrasado que estuviese el molde. Así que me las tuve que comer con cuchara.
Para no fallar, lo mejor es la utlización de este molde con cápsulas en las cavidades. Las cápsulas las puedes rellenar con las cucharas de toda la vida, una manga pastelera o un dispensador de helados. Esto último es lo más práctico, ya que apenas ensucias y todas quedas rellenas con la misma cantidad de masa.
Siguiendo estos pasos te saldrán estupendas!!
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