Roscón de Reyes

Para mí el dulce navideño por excelencia, que rico está!!!. No sé por qué es solamente típico para estas fechas, yo lo comería todo el año.

Los pasos son un poco largos, así que los pongo numerados para que se vean de forma más clara. La receta es del taller de dulces navideños en la Escuela de Cocina Albahaca y puedo decir el resultado final es increíble, el Roscón queda tierno, blandito y dura así por mucho tiempo.

Antes de comenzar con la receta quería comentar algo. Desde hace poquito tengo la Thermomix, con la que estoy más que encantada, y estaba deseando hacer el Roscón con ella, por lo engorrosa y larga que es la receta. Al final la he hecho un par de veces pero no he quedado muy contenta. 

A su favor he de decir que es mucho más rápida, limpia y cómoda. Sin embargo, el resultado final….., no sé, quizás debo practicar más. El Roscón queda con un sabor muy bueno y si te lo comes en el momento está perfecto, el problema viene después, al día siguiente está muy duro. La verdad es que si lo comparas con los que compras no se nota mucha diferencia, ya que también se ponen duros enseguida. Si no hubiera probado con anterioridad la receta que os voy a dejar, habría quedado contenta.

Si a alguien le pasa lo mismo o me puede dar algún consejo al respecto se lo agradecería mucho.

Así que al final, aunque más laboriosa, seguiré haciendo el Roscón con esta receta.

Ingredientes:

• 625 gr harina de fuerza
• 100 gr mantequilla en pomada
• 150 gr azúcar
• 20 gr levadura fresca
• 2 huevos
• 250 gr de leche (dividir en 100 + 150 gr).
• 80 gr agua de azahar
• 1 cucharadita de sal
• Ralladura de limón y naranja
• Para la decoración:
• 1 huevo para pintarlo
• Frutas confitadas 
• Almendras picadas 
• Azúcar 

Elaboración:

1. Comenzamos con la masa madre: mezclamos 100 gr de leche tibia (calentarla un poquito en el micro) con la levadura y dos cucharadas soperas de harina. Diluimos los ingredientes y mezclamos bien con varillas manuales. La tapamos con un papel film y dejamos que leve a temperatura ambiente en un sitio que no haya corriente (tiene que doblar su volumen).

2. Para el siguiente paso yo he utilizado una máquina amasadora que me compré hace tiempo en Lidl, no es la gran cosa pero me hace el apaño. 

Si no podemos contar con la máquina también se puede amasar a mano, es más engorroso pero también hacemos ejercicio. En este caso tendríamos que hacer una montaña con los ingredientes secos (harina) y luego hacer un agujerito en el centro y colocar los húmedos (el resto de los ingredientes), tipo volcán. Vamos uniendo y mezclando poco a poco hacia adentro, formando una masa y trabajándola. Si se pega echamos un poco de harina. Cuando esté lista volvemos a hacer un agujero y añadimos la masa madre. Seguimos amasando. 

Para esta receta como he optado por la opción cómoda, continúo la receta con la máquina amasadora.

Ponemos en la máquina el resto de la harina, la mantequilla en pomada, el azúcar, la sal, los huevos, el agua de azahar, lo que nos quedó de leche (150 gr) y las ralladuras de limón y naranja (si te es más cómodo puedes echar unas gotitas de esencia). Amasamos con la máquina hasta que la masa tenga elasticidad.

3. Añadimos la masa madre y seguimos amasando.

4. Dejamos reposar la masa a temperatura ambiente y la tapamos con un paño húmedo para que no forme costra. Tiene que doblar su volumen.

5. Cuando haya levado rompemos la masa dándole un golpe para que se baje y pierda aire. Volvemos a amasar un poco.

6. La guardamos en la nevera de 8 a 12 horas, dejándola tapada con un trapo para que vuelva a levar.

7. Sacamos de la nevera y le damos forma de anillo sobre la bandeja del horno. Para formar el anillo y que no se te pegue la masa a las manos, puedes mojártelas con un poco de aceite de girasol, así es mucho más fácil manejarla.

8. Dejamos levar, de nuevo, a temperatura ambiente unos 30 minutos.

9. Pintamos con el huevo batido. Decoramos con las frutas escarchadas, las almendras en granillo (o en láminas) y espolvoreamos con azúcar ligeramente humedecida.

10. Horneamos a 200º C durante 15 minutos (previamente debemos haber precalentado). Para que el roscón quede esponjoso metemos en el horno, mientras se está horneando, un cacharro con agua para que aporte humedad.

Como veis la receta es muy larga, así como las veces que hay que dejar levar el Roscón (creo que aquí está el truco de que quede tan tierno y esponjoso). En total, contado la masa madre, son cuatro veces las que tiene que levar.

Consejo: mientras esta levando humedece la masa con un pulverizador, con esto tardará más tiempo en ponerse duro. También podemos conservarlo en papel film.

Una vez frío ya puedes comenzar a comer. Si te gusta más con nata, ábrelo por la mitad y rellénalo.

Espero que os traigan muchas cosas los Reyes.